Noticias

Lleida se recupera de la tromba

Bomberos, vecinos y trabajadores retiran el agua de aparcamientos, comercios y hospitales inundados por la tormenta, que deja cuantiosos daños | | El agua corta la circulación de doce trenes regionales

R.RÍOS / H.CULLERÉ
Tras el aguacero que cayó la noche del sábado en la ciudad de Lleida, los vecinos intentaron ayer recuperar la calma y volver a la normalidad. No fue tarea fácil y el trabajo se acumuló para vaciar el agua de las decenas de aparcamientos que quedaron inundados y para limpiar plantas bajas de comercios y viviendas, de la estación de Renfe, que obligó a cortar la circulación los regionales, y los sótanos de Arnau y el Santa María, todos afectados por la tormenta.
Y es que los bomberos recibieron de la capital de Ponent más de 300 avisos (342 en el conjunto de la provincia y 505 en toda Cataluña) desde que se inició la tromba.

En la estación de tren varios efectivos afanaban ayer en sacar el agua de los pasillos que comunican las vías. La llegada de trenes en Lleida de las líneas de Regionales quedó interrumpida debido a la inundación de los pasos para los viajeros hacia los andenes y las vías de tren, de nivel inferior. Esta incidencia afectó 12 trenes entre primera hora de ayer y las cinco de la tarde, que tuvieron que parar en Benlloch (R-12) y Puig-verde de Lleida (R-13 y R-14) para que los pasajeros hicieran el resto del trayecto en autobús. La incidencia se resolvió después de que los Bomberos bombero durante horas el agua hacia el exterior. En cambio, los trenes de alta velocidad continuaron funcionando al estar las vías al lado de la estación, aunque con retrasos puntuales.

Los hospitales tampoco se libraron. Especialmente afectado quedó el sótano del Santa Maria, con casi un metro de agua en la zona de mantenimiento, almacén, vestuarios y salas de esterilización. El agua también dañó ordenadores, material esterilizado, de oficina y documentación, que los trabajadores amontonaban ayer en el exterior para limpiar las salas. "Hemos sufrido numerosos daños. Tuvimos que funcionar con la luz de emergencia una hora y fallaron monitores de la UCI puntualmente, pero ningún enfermo no se vio afectado ", explicó Paqui Guiral, supervisora ​​de guardia en Santa María.

En el Arnau, además de cortes de luz, también entró agua en zonas del sótano y se dispararon las incidencias de mantenimiento. En el parking, la segunda planta quedó inutilizada, lo mismo que los ascensores de acceso.

La zona baja de los juzgados en el Canyeret, el aparcamiento y parte de las salas de los cines Lauren, donde fue necesario reventar aseos, para utilizarlos como desagües, un pabellón de los Campos Elíseos o los vestuarios del Campo de Deportes fueron otros puntos donde hubo inundaciones y donde ayer se sucedieron sin parar los trabajos de limpieza. Comercios y aparcamientos, con ascensores fuera de funcionamiento, fueron los otros grandes damnificados de la tromba, que llegó a descargar en la ciudad 57 litros por metro cuadrado en media hora y 78,5 durante toda la jornada. Las zonas más afectadas fueron Cappont, Ronda con Rovira Roure, avenida del Segre, Pardinyes o Academia. "Es la tercera vez en siete años que se inunda el cruce de Pearson con Pardinyes Bajas, pero esta última después de las obras de mejora. En un parking quedaron seis coches atrapados con un metro y medio de agua ", explicó una vecina.
También mostraron su malestar a los ciudadanos de la calle Academia, con aparcamientos que llegaron a acumular hasta seis metros de agua. "Hace muchos años que nos quejamos. Saben que es un punto negro, pero no arreglan el alcantarillado ", criticaron los vecinos, también sobre la tardanza de los bombers.Tanmateix, el alcalde accidental, Rafael Peris, dijo que el episodio fue tan excepcional que pocos sumideros deberían podido gestionarlo sin incidencias.
La lluvia negó numerosas calles, pero el tráfico se fue restableciendo con el paso del día. Bajo el puente del ferrocarril en Pardinyes, convertido en un mar, se vivieron momentos de pánico cuando un urbano tuvo que lanzarse al agua para sacar de un coche un hombre.
En cuanto a daños personales, sólo se tuvo que lamentar los heridos del choque en el puente de Pardinyes, que finalmente terminó con cuatro víctimas, trasladadas en estado menos grave por el SEM en el Arnau.
Además del tráfico, también se registraron cortes de electricidad y hasta 2.686 clientes de la ciudad quedaron sin suministro. En la plaza delTreball, un transformador se inundó y obligó a colocar allí un generador.
Y todo este trabajo de vuelta a la normalidad con el miedo en el cuerpo ante la posibilidad de una nueva tormenta que se presumió durante la tarde, con precipitaciones fuertes en algunas partidas como la de Marimunt, pero nada comparable a sábado. Eso sí, el viento causó estragos.
Dejó una mujer herida en la plaza Catalunya al caerle en la cabeza un trozo de fachada de un edificio cuando estaba sentada en un banco y causó desperfectos en un coche en el Secano de San Pedro al precipitarse un ciprés desde varios metros de altura. La alerta continúa activada para hoy.

Segre, 15 de julio de 2013


<< Atrás